Diferentes partes del mundo tienen diferentes leyes para la protección y cuidado de los animales. Todo tiene que ver con la población local de ese animal, así como con el interés del gobierno local en otorgar ciertos derechos a esos mismos animales. Lo que debemos tener en cuenta es que en algunas partes del mundo, algunas especies están disminuyendo en número o incluso están en peligro de extinción.
Es difícil pensar en ello, viendo lo amigable y juguetón que parece, pero para algunas personas en Rusia, esta hermosa criatura fue solo el paso preliminar para hacer un lujoso abrigo de piel.
Antes de convertirse en Woody, el pequeño zorro formó parte de los animales que criaba una granja peletera para luego hacer uso de sus hermosos pelajes naturales.
Lo que no anticiparon en este cruel proceso fue la amabilidad de un tipo llamado Yaroslav. Al pasar fuera de la granja, vio al pequeño zorro caminando con la cabeza gacha entre la hierba. Sin pensarlo dos veces, tocó el timbre y preguntó si podía hacer algo por él.
Demostrando lo poco que les importaba la vida del pequeño zorro, sus dueños le dijeron que era libre de llevárselo… siempre y cuando les pagara lo que esperaban obtener con la venta de su piel.
Yaroslav tuvo que pagar una gran suma de dinero, pero los beneficios de esta inversión se vieron sólo un par de semanas después. Woody tardó sólo un par de días en acostumbrarse a su nueva situación de vida, ayudado sobre todo por el cariño de su nuevo dueño.
Yaroslav no sólo le mostró todo el amor que le habían negado, sino que también lo protegió y alimentó.
El zorro pagó por esta bondad mostrándose juguetón y cariñoso.
La historia de Woody tocó el corazón de muchos, sobre todo si se tiene en cuenta que hay personas que serían capaces de pasar por alto esa sonrisa de placer y disfrute, todo por ganar un poco de dinero. Por suerte tenemos gente como Yaroslav.