Una perrita de 4 años llamada Dora fue dada por muerta en las calles de México luego de ser atropellada por una motocicleta. Su columna quedó completamente cortada y fracturada por el impacto, provocando una parálisis inmediata.

Pero a pesar de su dolor paralizante, su primer instinto fue cuidar de sus cachorros que la necesitaban desesperadamente.

Durante toda una semana, Dora continuó cuidando diligentemente a su camada incluso en ese estado crítico. La valiente mamá sabía que su cuerpo estaba decayendo y esto la estresó mucho por el futuro de sus pequeños.

Entonces, cuando un grupo de rescatistas la encontraron, ella decidió aferrarse a la vida por el bien de sus preciosos hijos.

Cuando los rescatistas le ofrecieron comida a Dora, instantáneamente sintieron su fuerte voluntad de vivir. Recuperaron a todos sus cachorros y la llevaron rápidamente a la clínica.

Después de un examen exhaustivo, el veterinario recomendó cirugías de columna para reparar su columna. Sin embargo, era poco probable que volviera a caminar a cuatro patas.

Durante las siguientes semanas, los rescatistas criaron y encontraron buenos hogares permanentes para los cachorros de Dora. Luego centraron toda su atención en el tratamiento de Dora.

Dora aprendió brillantemente a caminar sobre sus patas delanteras, mientras las cirugías reparaban hasta cierto punto el daño neurológico extremo.

Mire este vídeo para vivir el momento triunfal en el que Dora recupera su verdadera independencia en una silla de ruedas. Ahora vive feliz en un hogar santuario que cuida animales con necesidades especiales como ella.

Dora no es solo una mamá obediente sino también una sobreviviente resiliente, ¡y su viaje realmente ha elevado nuestras almas!

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