¿Recuerdas a Mayah Aziz Oliveira, una niña que nació con un distintivo mechón de cabello blanco? Debido a su piebaldismo, una copdición que afecta la producción de melapiп heredada de su madre Talyta Yoυssef, de 41 años, ganó una popularidad abierta significativa.
“Cuando nació mi bebé, fue increíblemente fascinante”, comentó la madre de Talyta. Hubo mucha emoción en el Hospital Sofia Feldmap de Belo Horizonte, donde nació el niño, según Talyta.
“Cuando nació, el médico notó que tenía mechas en el cabello. Mientras enganchábamos la tela griega que cubría nuestra vista, nos dimos cuenta de que provenía de una cerradura. Hola…
El bebé fue capturado con fotografías en la sala de maternidad. Paυla Beltrão, fotógrafa, recibió las fotografías y decidió ofrecer a la familia una sesión fotográfica.
La fotógrafa Paυla Beltrão propuso realizar un ensayo sobre la familia poco después de que la madre abandonara la maternidad. Mayah, que tiene ahora 5 meses, desde entonces ha cosechado un gran éxito y cautiva a las personas donde quiera que vaya con su adorable y llamativa belleza.
Ella se dará cuenta de lo maravilloso que es esto y de lo cariñosos que son sus padres, y de que la situación ha sido adoptada perfectamente.
El fotógrafo se mostró inmediatamente entusiasmado con la creación de un ensayo sobre Mayah después de descubrir que nunca había visto un bebé como ella. La encontré increíblemente llamativa. Ella durmió bastante tranquilamente durante el rodaje. Tan pronto como la vi, le dije a Thalita: “Necesito fotografiar a tu hijo, pase lo que pase”, y ella se rió.
La historia de Mayah no sólo se hizo popular debido a su apariencia distintiva. Después de presenciar tanto apoyo hacia la niña, muchos individuos que también tienen una codición similar o comparable se relacionan con su historia y aprenden a abrazarse a sí mismos.
La madre comentó: “Recibí respuestas numerosas de otras personas que comparten rasgos que indican que su autopercepción ha cambiado. Comenzaron a aceptar sus diferencias con más tolerancia”.
Los transeúntes por la calle reconocieron a Mayah. Pasaban y exclamaban: “¡Esa es ella! La chica del pelo υпiqυe está allí”. Yo respondía: “¡Sí, es ella!” Es maravilloso. Es indescriptible.
Talyta observa: “Muchas personas maravillosas están habitando nuestras vidas. Ella es una pequeña muy amable que está participando en estos esfuerzos que parecen ser para ella. Lo está llevando muy bien”.